Las lesiones pueden cambiar las rutinas familiares. Ayudarse a lo largo del día une a la familia Gillum mientras intentan adaptarse a esta nueva realidad.

  • Momentos de aprendizaje para los niños. Las rutinas diarias en una familia que requiere cuidado especial pueden ser diferentes. La imaginación de un niño se amplía cuando ve a su padre o su madre heridos resolviendo problemas y haciendo grandes cosas. Cuando se les da a los niños la confianza para ayudar, ellos aprenden nuevas habilidades y desarrollan empatía hacia otras personas.
  • El cuidado es recíproco. Ayudar a lo largo del día a la pareja que ha sido lesionada es mucho trabajo. Los cuidadores como Tammy necesitan un descanso y apoyo. Ayuda externa, como terapia profesional y un perro entrenado especialmente, ayudan a los cuidadores a mantenerse fuertes. Cuando los esposos se agradecen y validan el uno al otro, se convierten en un equipo que puede enfrentar juntos grandes cambios.
  • Ayudar a otros en el camino. Encontrar la esperanza y ayuda entre sí, une a las familias y les da la fuerza para ayudar a otros. Como su defensor, Sherman les da voz a los veteranos lesionados, porque cuando las familias tienen una red de apoyo que las entiende, es más fácil adaptarse a la vida después de una lesión.